Alentadora producción de huevos
JUAN VARELA PÉREZ
juan.pvp@granma.cip.cu
El huevo es uno de los alimentos que le generan al Estado
costosas inversiones, a la hora de adquirir los insumos destinados
al pienso que consumen las gallinas ponedoras.
De ahí la importancia económica de aprovechar el trigo, el maíz,
la soya y otros recursos y lograr que el gasto de pienso sea fiel a
la cantidad de huevo comprometida.
Misleidis
Pérez admite que nunca llegó a imaginar cuán atraída se sentiría por
la avicultura.
La adquisición de sus componentes en mercados foráneos y a
grandes distancias, no siempre viaja por un camino despejado y
fácil. Traer desde afuera lo requerido para cumplir el plan exige
vencer no pocos obstáculos. Por eso es imprescindible cuidar bien
ese recurso e ir al tope en su aprovechamiento y tener presente,
además, algo que a veces se olvida: garantizar el "relevo" de las
gallinas ponedoras cuando estas, al año, vencen su ciclo.
Artemisa, que tiene para este año un plan de 229 millones de
posturas, el mayor entre todas las provincias, trabaja por hacer
realidad tal propósito si alimenta sus aves de forma estable.
Los
avicultores de Artemisa conocen su alta responsabilidad en esta
actividad.
Muchos avicultores opinan que las ponedoras se asemejan a una
fábrica: si el suministro del pienso que las sostiene falla, la
entrega de huevos desciende.
Los artemiseños tienen un cercano ejemplo de lo que puede
suceder, si demora la llegada del pienso. En los días finales de
enero y comienzos de febrero, registraron una merma considerable en
la dosis de alimento que ingieren las gallinas: un día sin alimento
significa recoger unos 30 000 huevos menos.
BORRAR PRONTO LA DEUDA
Los avicultores de Artemisa, con 12 unidades ponedoras acopiaron
50 millones 149 mil posturas, en el pasado trimestre, casi 2
millones menos de lo que debían entregar.
Impresiona
al visitante la imagen de las instalaciones, en especial las naves
de las gallinas ponedoras.
Las unidades del territorio, empeñadas en ser cada vez más
disciplinadas y eficientes, están comprometidas con el 12 % del
programa nacional de huevos del 2011.
No se incluyen en este análisis las granjas ponedoras de San
Cristóbal y Bahía Honda, aún operadas por Pinar del Río y todavía en
proceso de cambios administrativos y estructurales.
En abril se normalizó la alimentación de las ponedoras y, ahora,
las granjas Juan Manuel Márquez y Baracoa se esforzarán al máximo
para que la Empresa Productora y Comercializadora de Carne y Huevos
de Aves borre pronto la deuda, lo que esperan se alcance en mayo.
Luis Carlos Pérez, director de la entidad en el territorio,
confirmó a Granma que, con el alimento estable, el promedio
diario de huevos puede, incluso, rebasar el plan, dadas la capacidad
técnico-organizativa y la actitud del personal por incrementar la
eficiencia y la integralidad.
CAPACIDAD DE RESPUESTA
Hasta la fecha, el territorio satisface sus compromisos en varios
de los índices esenciales y logra el grado de conversión que
contempla el plan.
La gallina es un ave muy delicada, por eso la veterinaria Lien
Romero Fitó y el equipo técnico que la acompaña en la granja Baracoa,
la más grande del país, vigilan su medio ambiente, la salud y la
calidad del pienso y el agua.
Wilfredo Guevara, el administrador, asegura que hay condiciones
para rebasar a mediados de mayo, con todas las aves incorporadas,
los 170 000 huevos diarios.
A su vez, los trabajadores de la granja Juan Manuel Márquez suman
a la belleza del lugar, un aporte de indudable valor para Artemisa:
en la etapa anterior entregaron casi 7 millones unidades, para un 16
% por encima de su programa.
Misleidis Pérez López, joven navera, opina que cada labor tiene
sus secretos y exigencias y, enamorada de lo que hace, asegura
sentirse mal cuando no obtiene en la nave los 154 cartones diarios,
de 30 huevos cada uno.
Liosbel Pérez Fernández, administrador de la granja, afirma que
la estabilidad del personal, la atención fitosanitaria y el
cumplimiento anual del ciclo de ponedoras permiten "refrescar" el
rendimiento con nuevos animales y permanencia de los altos niveles
productivos.
¿CÓMO MARCHA EL PAÍS?
Jesús García Toledo, director de la Unión Nacional de la Empresa
Avícola, considera imprescindible que Artemisa marche bien.
Al referirse al país informó que el primer trimestre terminó con
un 4 % por encima del plan. Reconoció el meritorio trabajo de
Artemisa no solo por la cantidad de huevos, sino por el uso de los
recursos e insumos, el manejo de los animales, la experiencia y
calidad de su personal —con una alta presencia de mujeres—, la
atención humana y la aplicación de sistemas de pago que estimulan
los resultados individuales a partir de un requisito base: el
cumplimiento del plan.
A los reporteros de Granma que recorrieron estas dos
granjas, les llamó la atención el amor por el centro, la siembra de
cada pedazo de tierra disponible para autoabastecerse de diferentes
cultivos y la grata imagen de sus instalaciones, algo común en
muchas de las restantes granjas. Cuando se trabaja así, hay razones
para confiar. |