En nombre de las más de 5 000 víctimas de los actos violentos
contra Cuba planeados en territorio estadounidense, los integrantes
del Comité enviaron al mandatario una segunda carta —entregada ayer
en la Oficina de Intereses de La Habana—, en la cual pidieron
justicia y denunciaron el doble rasero de la política norteamericana
en materia de terrorismo.
Afirmaron que la farsa judicial que esta semana en El Paso,
Texas, declaró inocente a Posada Carriles, hace más reveladora la
injusticia de la prisión que guardan en cárceles norteamericanas los
Cinco luchadores antiterroristas cubanos por defender a su pueblo.
No cejaremos en el empeño de exigir que el gobierno de Estados
Unidos honre los tratados internacionales y las resoluciones de la
ONU, que en materia de lucha contra el terrorismo se han suscrito,
precisan en el texto.
Al respecto Camilo Rojo, integrante del Comité, condenó la
inactividad del gobierno norteamericano, el cual tiene las pruebas
suficientes para juzgar a Posada Carriles como terrorista.
Giustino di Celmo, padre del joven Fabio, muerto en los atentados
ocurridos en 1997 en La Habana, dijo conmocionado que el asesino
confeso no solo se burla de todas las víctimas del terrorismo, sino
también de los hombres y mujeres honestos del mundo.