MOSCÚ,
15 abril.— La pertiguista rusa Yelena Isinbayeva entró hoy a formar
parte del club atlético Dinamo para volver a entrenarse a las
órdenes de su descubridor, Evgueni Trofímov.
Tras más de cinco años de exilio, la llamada Zarina de la pértiga
regresó a su ciudad natal, Volgogrado, con el objetivo de recuperar
la senda del triunfo tras varios meses de mediocres resultados.
Con Trofímov a su vera, Isinbayeva logró 18 récords del mundo en
apenas dos temporadas (2004 y 2005), mientras que desde su traslado
a Mónaco logró nueve en cinco campañas bajo las órdenes del búlgaro
Vitali Petrov, dijo PL.
Aunque conquistó títulos importantes como el olímpico de
Beijing-2008 o el mundial de Osaka-2007, muchos expertos consideran
que su progresión se frenó en seco.
Luego de perdonar a su pupila, Trofímov declaró que el bajón de
rendimiento se debió a una mala planificación de los entrenamientos,
y a la poca exigencia del propio Petrov.
Los saltos de Yelena se volvieron pesados y perdió el dinamismo y
la capacidad de vuelo, que le diferenciaban del resto. La situación
era previsible, es un stradivarius y la tocan como si fuera una
balalaika (mandolina), aseveró.
No obstante, según el avezado preparador el problema tiene
solución.
Todo depende de cómo la dirija el entrenador. Según mis
previsiones, ella puede saltar 5.15-5.20 metros; por lo menos, así
lo planifiqué yo. Desgraciadamente, no me dejaron escribir esa
historia, apuntó.
En cuanto a preseas, la pertiguista se propone ganar los cetros
de los Juegos Olímpicos de Londres-2012 y de los Mundiales de
Moscú-2013, tras los cuales tiene previsto retirarse para formar una
familia.