Con la primavera en casa, esta capital parece aprovecharla desde
temprano: autoridades gubernamentales, representantes del cuerpo
diplomático, periodistas y escolares plantaron hoy árboles para
honrar el Año Internacional de los Bosques (AIB).
La cita tuvo lugar en el Parque Da Wangjing, en el distrito
Chaoyang, donde de momento todo se tornó un poco más verde, como se
lo propone la iniciativa de la ONU que estimula la conservación y
recuperación de esos ecosistemas para avanzar hacia un desarrollo
sostenible.
Esta ceremonia forma parte de la contribución de China al citado
empeño, al que también aportará con otras actividades, incluidos
talleres a fin de elevar la conciencia y promover la cultura sobre
tan necesaria labor, en correspondencia con el lema del AIB "Bosques
para las personas".
Al hablar en la ocasión, el ministro de la Administración Estatal
de recursos Forestales, Jia Zhibang, recordó que el país más poblado
del mundo hace tres décadas lanzó una campaña mediante la cual se
plantaron más de 60 mil millones de árboles, con un amplio respaldo
popular.
En todos los presentes era apreciable la satisfacción de
contribuir a proteger y mejorar el medio ambiente, como expresó el
embajador de Surinam en este país, Mohamed Isaak Soerokarso, uno de
los diplomáticos que en la jornada tomó la pala para hacer realidad
su mensaje.
Mientras, su homólogo de Chile, Luis Smichdt, coincidió en esa
valoración al resaltar la importancia de la iniciativa, sobre todo
porque estudiantes del nivel primario también fueron convocados,
añadió.
Al señalar hacia un grupo de escolares ocupados en las tareas
pertinentes, Smichdt consideró muy positiva su participación "porque
les crea conciencia desde pequeños de que tener árboles hoy día
equivale a vida".
Como parte de la mencionada campaña, el pasado día 2 las máximas
autoridades del país, incluido el presidente, Hu Jintao, se sumaron
a una jornada similar, a la que aportaron también miles de
residentes en esta capital.
La ONU designó 2011 Año Internacional de los Bosques a fin de
revertir realidades como la reflejada por la siguiente estadística:
cada minuto desaparecen unas 25 hectáreas de floresta en el mundo.
Su lema resalta el papel vital de los seres humanos en la
protección de esos ecosistemas, que constituyen el hogar de 300
millones de personas en el mundo, reportó Prensa Latina.