La
destrucción en Japón por los dos fenómenos naturales no tiene
precedentes.
La nación nipona podría necesitar hasta cinco años para
recuperarse del desastroso sismo y posterior tsunami, que causaron
daños por 235 000 millones de dólares, según destaca el Banco
Mundial en un informe.
La institución también estima que la economía decrecerá 0,5 % en
el 2011. Sin embargo, prevé que se recupere de nuevo en el segundo
semestre del año.
El
sismo y tsunami del 11 de marzo interrumpieron las redes productivas
en las industrias automotriz y electrónica.
"El daño a la vivienda y la infraestructura no tiene
precedentes", asegura el Banco Mundial. "El crecimiento deberá
aumentar en los siguientes trimestres a medida que los esfuerzos de
reconstrucción, que podrían durar cinco años, se aceleren", afirma
el informe.
El banco estima que los daños equivalen a un 2,5 % y un 4 % del
PIB del país en el 2010.
El Banco Mundial también pronosticó, en un estudio separado, que
el este de Asia se vería afectado.
"En el futuro inmediato, el mayor impacto será en términos de
comercio y finanzas", dijo Vikram Nehru, economista, jefe para el
este de Asia y la Región Pacífico del Banco Mundial.
La región noreste de Japón, donde golpearon duramente los
fenómenos naturales, es zona de puertos, plantas siderúrgicas y
fabricantes de partes para automóviles y artículos electrónicos.
"Las alteraciones a las redes productivas, especialmente en las
industrias automotriz y electrónica, podrían continuar provocando
problemas", dijo el Banco Mundial.
Según el corresponsal de la BBC en Tokio, Chris Hogg, a los
japoneses se les había dicho siempre que era el país mejor preparado
en el mundo para enfrentar desastres naturales.
En su opinión, algunos japoneses se dan cuenta de que, incluso si
esto es cierto, el gobierno no podría protegerlos.