Los franceses, que celebran también este martes el Día
Internacional de la Mujer, amanecieron con el síndrome de la
escalada de la ultraderecha en las encuestas, una tendencia que
analistas interpretan de diversas formas, reporta Prensa Latina.
Todo surgió después de publicado este domingo en el diario Le
Parisien el sondeo que daba a Marine Le Pen, ahora líder del
ultraconservador Frente Nacional (FN), con 23 por ciento de
intención de votos hacia las presidenciales.
Ante los escépticos que pusieron en duda la veracidad de la
encuesta, otras agencias de opinión se dieron a la tarea de repetir
la experiencia de cara a las elecciones presidenciales de 2012. Y
los resultados fueron similares.
Le Pen, hija de Jean Marie Le Pen, histórico dirigente del FN en
retiro, superó en la primera vuelta al actual mandatario Nicolás
Sarkozy, y la eventual candidata y máxima dirigente del Partido
Socialista (PS), Martine Aubry.
Es el guiñol de las encuestas y el circo de la política de
Francia , dijo con su siempre agudo lenguaje el líder del Partido de
Izquierda (PG) y aspirante presidencial, Jean Luc Melenchon, también
eurodiputado.
La ratificación en los sondeos de las simpatías por Marine Le Pen
trajeron los recuerdos de cuando su padre sacudió a la opinión
pública nacional al pasar a la segunda ronda de los comicios del
2002, luego derrotado por Jacques Chirac.
Entonces, el rechazo al socialista Lionel Jospin fue visto como
un voto de castigo ante las actuaciones de su organización. En la
actualidad, el desempleo y el descenso del poder adquisitivo de la
población, son dos espinas clavadas en los franceses.
Pero en lugar de ir al estudio del fenómeno, la primera reacción
de la Unión por un Movimiento Popular (UMP) de Sarkozy y el PS,
comenzaron a rasgarse las vestiduras en público, culpándose los unos
a los otros por el éxito asombroso del FN.
Luego vinieron los cuestionamientos a las encuestadoras de la
razón por la cual no incluyeron al director-gerente del Fondo
Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, como
candidato socialista.
La izquierda señaló a Nicolás Sarkozy como causa principal del
ascenso del FN, en razón del lanzamiento de debates sobre temas que
por lo general son banderas de los ultranacionalistas como la
inmigración, los gitanos, el islamismo y la lucha antiterrorista.
Es un sondeo ( ) pero hay que tomarlo en serio. Nuestro trabajo
es evitar a cualquier precio un nuevo 21 de abril (cuando Le Pen
pasó a segunda vuelta), comentó el portavoz de los socialistas,
Benoit Hamon.
Para especialistas consultados por la cadena informativa de
televisión iTele, puede que los franceses estén enviando una señal a
los demás partidos: si sus plataformas no responden a las demandas
del pueblo, habrá otro voto de castigo.