Monarcas de sus respectivas ligas de fútbol, el Manchester United
de Inglaterra y el Olympique de Marsella de Francia buscarán esta
noche el triunfo en un partido de difícil pronóstico, reporta Prensa
Latina.
Será en el estadio Velodrome de Marsella en octavos de final de
la Champions League (la Copa de Campeones de Europa) y si bien la
balanza de momento se antoja equilibrada, el cuadro inglés dirigido
por Alex Ferguson goza de ligero favoritismo.
La tropa del MU, como se le conoce al elenco visitante, cuenta
con dos armas letales en el ataque, el inquieto Wayne Rooney, y el
eficiente portugués Nani. Pero igual se puede aparecer con un gol el
búlgaro Dmitri Berbatov, entre otros.
Ninguno de los dos hemos tenido una campaña similar a la
anterior. Por supuesto que el Manchester United posee una nómina
temeraria, pero el Marsella está en capacidad de lograr un buen
resultado, comentó el técnico Didier Deschamps.
Sin embargo, Deschamps, capitán del equipo de Francia campeón
mundial de 1998, admitió que todo dependerá de la concentración de
los defensores y de la marcación para cerrar espacio en el
mediocampo.
Los problemas de Marsella apuntan asimismo a la ausencia del
ascendente delantero André Pierre Gignac, lesionado.
Es una baja muy sensible. Descansará entonces en el rendimiento
de Loic Remy, el rendimiento del argentino Lucho González y la
entrega del brasileño Brandao, opinó al diario L Equipe el ex
mediocampista galo Emmanuel Petit.
Por su parte, Sir Ferguson, como viejo zorro casi siempre con
excelentes resultados, subrayó que el MU saldrá a la cancha con
mucha humildad y respeto por el rival.
El Velodrome es un escenario difícil y el Marsella es un gran
club. No vamos a especular con un marcador, simplemente queremos
hacer las cosas bien y luchar por la victoria , puntualizó el
preparador de nacionalidad escocesa.