Los médicos, enfermeros y obstetras italianos que establezcan un contacto directo con los pacientes deberán someterse a pruebas antidrogas, según publican medios informativos del país, reporta Prensa Latina.

Tales controles ya se realizan en sectores como los pilotos aéreos, conductores de medios de trasporte público y constructores que ejecutan obras a gran altura, explican diversas fuentes.

El jefe del Departamento de Políticas Antidrogas, Giovanni Serpelloni, afirmó que también se está valorando la posibilidad de incluir en estas comprobaciones a los profesores de educación primaria y superior.

Las autoridades italianas quieren unificar el listado de las categorías laborales consideradas de riesgo, las cuales deben efectuar controles periódicos sobre el consumo de alcohol y drogas.

Annalisa Silvestro, presidenta del Colegio de Enfermeros (Ipasvi), aseguró que los profesionales del gremio están dispuestos a pasar los tests para aumentar así la confianza de los ciudadanos hacia el personal sanitario.