WASHINGTON, 17 de febrero. — Las posibilidades de cerrar la
controvertida prisión de la ilegal base de Guantánamo, montada por
Estados Unidos para encarcelar sospechosos de terrorismo, son "muy,
muy bajas", admitió hoy el ministro de Defensa norteamericano,
Robert Gates.
Hablando durante una audiencia en el Senado, el jefe del
Pentágono dijo que las probabilidades de cerrar la cárcel son
prácticamente inexistentes, en especial, a causa "de la oposición"
que la idea encontró en el Congreso, reportó ANSA.
El cierre de la cárcel, ampliamente denunciada a nivel
internacional por las torturas contra los detenidos, fue una de las
promesas de la campaña que llevó al demócrata Barack Obama a la
presidencia de Estados Unidos.
La oposición republicana rechazó en particular la posibilidad de
trasladar prisioneros a cárceles en territorio norteamericano.