Al menos cinco integrantes de un comando insurgente afgano
murieron en un ataque a un cuartel policial en la convulsa provincia
sureña de Kandahar, reportaron medios de comunicación.
De acuerdo con autoridades regionales, los asaltantes se
ocultaron en un local aledaño a la comisaría desde donde lanzaron su
operación, la cual incluyó una serie de explosiones.
El tiroteo contra las fuerzas del orden se prolongó durante más
de tres horas y dejó decenas de heridos entre policías y civiles,
según los conteos preliminares.
Kandahar constituye uno de los bastiones de los grupos rebeldes
opuestos a la presencia en el país de tropas de la OTAN, que
afrontan su momento más difícil desde el inicio de la ocupación a
fines de 2001.
La provincia registra un notable incremento de la actividad de
los talibanes en las últimas semanas.
El mes pasado un atentado suicida provocó la muerte del
vicegobernador de la región, informó Prensa Latina.