La concentración de hoy en torno a la plaza Tahrir se distinguió
de las anteriores por una mayor organización y, sobre todo, por las
grandes medidas de seguridad instaladas para evitar una
confrontación directa con los partidarios de Mubarak.
El ministro de Defensa, Mohamed Husein Tantaui, visitó la plaza y
revisó el dispositivo de seguridad a cargo de las Fuerzas Armadas.
Conversó con algunos de los manifestantes y les insistió en el
diálogo que ofrece el Gobierno a la oposición, que rechaza
participar en esas negociaciones mientras Mubarak siga en el poder.
También hizo su aparición en ese escenario el secretario general
de la Liga Árabe, Amro Musa, a quienes algunos egipcios apuntan como
candidato para sustituir al actual Presidente.
En Alejandría, la segunda ciudad del país, decenas de miles de
personas protestaron en un ambiente "festivo y pacífico", según
testigos.
Los últimos reportes dan cuenta de al menos 5 000 heridos desde
el inicio de las protestas, según relató al canal Al Arabiya el
ministro de Salud, Ahmed Farid.