Museo Farmacéutico de Matanzas

Inmueble con un millón de tesoros

Livia Rodríguez Delis

Caracterizado por una mezcla de arte y ciencia, reflejada en sus valiosos bienes patrimoniales, el Museo Farmacéutico de la ciudad de Matanzas atesora documentos, instrumentos y utensilios originales del siglo XIX.

Foto: Otmaro Rodríguez Tras 129 años permanecen en sus estanterías originales frascos y utensilios escogidos por sus fundadores.

La antigua Botica francesa, fue fundada en 1882 por los doctores Ernesto Triolet Lelievre (francés) y Juan Fermín de Figueroa y Veliz (cubano), y funcionó ininterrumpidamente hasta 1964 cuando reabrió sus puertas como museo.

La licenciada Patria Dopico Borrego, directora del centro, explicó a Granma que durante 82 años la otrora farmacia ganó fama y clientela por la calidad de sus productos. "Allí se procesaban y vendían medicinas basadas en plantas medicinales y se expendían medicamentos provenientes de España, Francia, Alemania y Estados Unidos", afirmó.

Además de piezas de laboratorio, frascos de cristal, etiquetas y colecciones decorativas y de albarelos franceses, el Museo conserva en su biblioteca más de un millón de fórmulas en los libros de asentamientos de recetas y textos en varios idiomas sobre botánica, farmacia operatoria, medicina y otras disciplinas, que son consultados en la actualidad por estudiantes universitarios de las carreras afines.

 

| Portada  | Nacionales | Internacionales | Cultura | Deportes | Cuba en el mundo |
| Comentarios | Opinión Gráfica | Ciencia y Tecnología | Consulta Médica | Cartas| Especiales |

SubirSubir