El Centro Nacional filipino de Coordinación para Desastres
confirmó la muerte de 89 personas por las inundaciones provocadas
por intensas lluvias.
Desde hace más de un mes llueve profusamente en las provincias
sureñas de Surigao y Agusan, donde las ríadas arrastran escombros y
provocaron el desplazamiento de cerca de dos millones de pobladores,
reporta Prensa Latina.
La Oficina de Defensa Civil en Manila indicó que los daños a los
cultivos y la infraestructura sobrepasan los 50 millones de dólares,
según cálculos preliminares.
Filipinas, como Australia y otras regiones de Asia, sufre desde
diciembre último un desastroso incremento de los cambios en el
clima, provocados, de acuerdo a los expertos, por el fenómeno La
Niña.