Socialistas y seguidores de la Revolución Bolivariana conmemoran
hoy la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992, liderada
por el presidente del país, Hugo Chávez, la cual exigía dignidad
para el pueblo venezolano.
De acuerdo con el diputado del Partido Socialista Unido de
Venezuela, Darío Vivas, en los estados Carabobo y Zulia se
concentrarán las fuerzas revolucionarias para conmemorar la fecha,
donde también se hizo sentir la rebelión, reporta Prensa Latina.
El 4 de febrero de 1992 se reinició un nuevo camino de luchas que
desembocó en la victoria de Chávez en las elecciones de 1998, donde
alcanzó el 56,20 por ciento de los votos, lo que se consideró una
victoria contundente frente a sus rivales más fuertes, Henrique
Salas R mer e Irene Sáez.
Los participantes en la rebelión demandaban respeto y dignidad
para el pueblo, reprimido y marginado por los gobiernos burgueses de
la Cuarta República.
Y es que, tras el auge petrolero de la década de 1970, el país
comenzó un retroceso por las malas praxis económicas de los
gobiernos de Luís Herrera Campíns (1979-1984) y Jaime Lusinchique
(1984-1989) que generaron deudas, espirales de inflación y más
pobreza.
Más tarde, el ex presidente Carlos Andrés Pérez durante su
segundo mandato (1989-1993), implementó un programa de ajustes
macroeconómicos promovido por el Fondo Monetario Internacional
(FMI), considerado el colofón de las insatisfacciones sociales de
los venezolanos.
El incremento de las tarifas de servicios públicos como teléfono,
agua potable, electricidad y gas doméstico, transporte, entre otras
medidas del paquete económico del FMI, generó el rechazo de la
población.
Como consecuencia, miles de hombres y mujeres iniciaron una serie
de protestas pacíficas, así como saqueos a mercados en Guarenas, 15
kilómetros al este de Caracas, la mañana del 27 de febrero de 1989,
las cuales se extendieron a la capital, hasta el día 29.
El Caracazo, como se llama a esa cadena de acciones populares,
reprimidas brutalmente a tiros por las fuerzas de seguridad, fue uno
de los antecedentes que llevaron a la rebelión encabezada por Chávez
en 1992.
Tras los saqueos, el gobierno declaró el toque de queda,
militarizó las ciudades principales y activó el "Plan Ávila", el
cual confería al Ejército la custodia de la ciudad, habilitándolos
para el uso de armas de guerra al momento de contener las
manifestaciones.
Se estima que hubo un millar de muertos, sobre todo de los
barrios más pobres donde el ejército se ensañó.
El Caracazo fue la mecha, el disparador de la rebelión de la
juventud militar que ya no aguantaba más, aseguró Chávez el pasado
miércoles, cuando cumplió 12 años frente al gobierno.
Si no hubiese sido por la rebelión popular de El Caracazo tampoco
hubiera ocurrido el 4 de febrero, afirmó el dignatario quien goza de
un 54,7 de popularidad, según la más reciente encuesta de Gis XXI.
El 4 de febrero de 1992 unos dos mil 357 jóvenes militares
guiados por Chávez, entonces teniente coronel, se alzaron contra el
paquete de medidas económicas neoliberales del FMI implementadas por
Carlos Andrés Pérez.
Los participantes pertenecían a 10 batallones de las guarniciones
militares de los estados Aragua, Carabobo, Miranda, Zulia y el
Distrito Capital.
Muchos de los integrantes del grupo formaban parte del Movimiento
Bolivariano Revolucionario 200, cuya ideología política estaba
basada en el pensamiento de Simón Bolívar.
El intento por derrocar al gobierno de Carlos Andrés Pérez y
orientar la vida del país por un camino de justicia social falló, y
todos los participantes en esta acción fueron llevados a prisión.
La causa fue sobreseída y los militares fueron puestos en
libertad dos años después, durante la presidencia de Rafael Caldera.
Chávez, tras ser aprehendido el mismo día de la rebelión,
agradeció a los valientes soldados del Regimiento de Paracaidistas
de Aragua y en la Brigada Blindada de Valencia su valentía en la
operación.
Lamentablemente, por ahora, los objetivos que nos planteamos no
fueron logrados en la ciudad capital, dijo en un mensaje televisado.
Nosotros, acá en Caracas, no logramos controlar el poder. Ustedes
lo hicieron muy bien por allá, pero ya es tiempo de reflexionar y
vendrán nuevas situaciones y el país tiene que enrumbarse
definitivamente hacia un destino mejor, sentenció.
Después de 19 años de esa acción, Cháve,z junto a la mayoría de
su pueblo, dirige el destino de su país.
Venezuela resucitó y nunca más morirá, dijo el dignatario el
miércoles al conmemorarse los 12 años de su llegada a la presidencia
del país.
Hay que seguir consolidando el Poder Popular para convertirlo en
una nueva institucionalidad revolucionaria, por la vía del
capitalismo no hay ninguna posibilidad de solucionar los grandes
problemas que afectan a la colectividad, sentenció el jefe de
Estado.