El
presidente del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS),
Carlos Rotondaro, aseguró que esa cifra creciente forma parte de las
políticas de justicia social, premisa fundamental en la gestión del
presidente del país, Hugo Chávez.
Sectores que en el pasado fueron despojados de sus derechos más
elementales, en particular adultos mayores, hoy son reivindicados,
aseguró Rotondaro en entrevista con Venezolana de Televisión.
Recalcó que ha sido una tarea constante y paulatina, y en estos
momentos, se trabaja para aumentar el número y dar especial atención
a los adultos mayores que se encuentran en refugios tras las lluvias
de noviembre y diciembre últimos.
Recordó que una de las primeras acciones de justicia social, fue
la homologación de la pensión por vejez al salario mínimo decretada
por Chávez.
Esto permite que los pensionados no sólo cobren un monto igual a
dicho salario sino que además, las pensiones se incrementan a la par
de un alza del sueldo mínimo.
La medida significó para muchos pensionados un incremento de
hasta 400 por ciento en sus ingresos en relación con lo que recibían
por concepto de pensión en épocas anteriores.
El titular del IVSS precisó que en el año 1998, el grupo de
pensionados del país apenas sumaban 200 mil personas. En dos años,
la cifra se triplicó, para colocarse en 600 mil beneficiados.
Ya en diciembre de 2008 llegó un millón 289 mil 320, lo cual
representa un incremento de más de 233 por ciento, en sólo 10 años.
Rotondaro resaltó los decretos 7401 y 7402 los cuales constituyen
una garantía para la inclusión a la seguridad social.
El primero otorgó la posibilidad a las mujeres de 55 años y a los
hombres de 60 años de acceder al sistema de pensiones del IVSS y de
cancelar las cotizaciones que hicieran falta para llegar a las 750
exigidas por ley para disfrutar de este beneficio.
De esa manera, el gobierno garantizó la pensión por vejez a
quienes que, aunque no contaran con las cotizaciones de 750 semanas
laboradas, cancelara en bolívares el monto correspondiente.
A los venezolanos que poseían al menos 700 cotizaciones, el
Estado cubrió las restantes con lo que más de 300 mil personas se
sumaron a este beneficio social.
Asimismo, el decreto 7402 garantiza la inclusión de pescadores y
campesinos al sistema de seguridad social, quienes por las
características de su labor independiente nunca tuvieron la
oportunidad de acceder a estos programas de justicia.
Más de 20 mil campesinos y pescadores de la tercera edad han
recibido este beneficio sin precedentes en toda la historia del
país.