El PCV logró frenar las irregularidades que endeudaron y sumieron
en la bancarrota a la mayor naviera de Vietnam, pero la militancia
quedó preocupada por la eficacia de los mecanismos de control.
Sa Nhat Hoa, del Departamento de Inspección del Comité Central
del PCV, descartó al caso Vinashin de la agenda del cónclave, pues
el problema había sido resuelto por las agencias pertinentes.
Sin embargo, durante los debates varios delegados consideraron
una prioridad política el incremento de las actividades de examen e
inspección para construir un Partido más sólido y puro.
Trinh Long Bien, subdirector de dicho Departamento, advirtió que
la aceleración del proceso de "Doi mo" (Renovación) requiere mayor
inspección como salvaguarda a la construcción del socialismo.
"La degradación ideológica, ética y en los estilos de vida, la
burocracia y la corrupción, el despilfarro y la negatividad en la
militancia debe ser evitada", alertó Long Bien.
Señaló que la inspección debe hacerse pública, de manera objetiva
y democrática, y exigió a los funcionarios partidistas y estatales
ser modelo de disciplina y respeto a las leyes y los estatutos.