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— La violencia en Paquistán continúa en ascenso al reportarse la
muerte de al menos 17 personas al estallar una bomba en un ómnibus
al sur de Peshawar, capital de la sureña provincia de Khyber-Pakhtunkhwa.
El atentado se une a la ola de asesinatos y atentados que provocó
una veintena de víctimas en Karachi, donde se decretó desde el
domingo último, el toque de queda.
Desde hace una semana las regiones sur y norte del país son
sacudidas por una creciente violencia, cuyas causas, según
definieron las autoridades, responden a intereses políticos y
étnicos.