El fornido santiaguero de más de dos metros de estatura, Robelis Despaigne, único taekwondoca cubano que ostenta un metal áureo en mundiales universitarios, exhibió con maestría sus movimientos en el tope de confrontación Cuba-Inglaterra en la Ciudad Deportiva capitalina, el cual tuvo al estelar inglés Aaron Cook como principal atracción.

"Yosbel Pérez fue el más destacado por los nuestros al ganar sus tres combates. Robelis también lució muy bien, con mucha seguridad en sus acciones. Si no hubo más acción por parte de él fue porque su contrario arriesgó poco", expresó a Granma Leudin González, entrenador del equipo masculino antillano.

"Creo que el objetivo se cumplió, pues tuvimos la oportunidad de topar con atletas de gran nivel. Este es un punto de partida enorme para nosotros este año".

El titular mundial juvenil Aaron Cook (-80) era el centro de atención del certamen y para que los presentes se deleitaran con sus patadas voladoras le fueron programados cuatro pleitos, en los cuales marcó un total de 62 puntos y recibió 42.

"Para mí es una gran experiencia medirme a los agresivos atletas cubanos. Todos los rivales fueron muy difíciles, debí cuidarme de su explosividad. Mi objetivo fue practicar algunos elementos nuevos, esencialmente las técnicas de giro a la cabeza.

"Desde mi última visita a Cuba en el 2008 he apreciado un cambio en la fortaleza física y rapidez de los taekwondocas cubanos, y un mejoramiento en el pensamiento técnico-táctico", dijo Cook, quien piensa asistir en mayo al Campeonato Mundial.

Nidia Muñoz fue la mejor exponente femenina del tope, tras ganar de forma convincente (18-9) a Jade Jones, campeona en los Juegos Olímpicos de la Juventud Singapur’10.