Programa Mular de fuertes bridas

Germán Veloz Placencia

Orgulloso va y viene Tomás Javier Espinosa Jiménez por los alrededores de Marieta 3, en las cercanías de la ciudad de Sagua de Tánamo, la llamada capital del Plan Turquino en Holguín. La causa es la demanda y la aceptación de los animales criados en el centro que administra desde hace 4 años con la dedicación de quien sabe apreciar la importancia de los mulos en las áreas montañosas.

Foto: Juan Pablo CarrerasEl programa persigue la obtención de mulos apropiados para el trabajo en la serranía a partir de los diagnósticos de gestación y reposición, así como la adquisición paulatina de sementales de burros.

Tan pronto se le solicita hablar, comenta que aquí nacieron y se desarrollaron 6 de los 9 integrantes del arria ganadora del segundo lugar en la prueba de habilidades de la Feria Nacional del Mulo, desarrollada en el año 2009 en Mayarí Arriba, en la provincia de Santiago de Cuba.

"Además, Perico, que todavía está con nosotros, alcanzó el segundo puesto en la modalidad de carrera. Quiere decir que nuestros mulos, además de fuertes, son rápidos", puntualiza.

Durante el pasado año en el centro nacieron 12 mulos, refiere Tomás, muy alegre porque acaban de adquirir un joven ejemplar de burro canadiense con excelentes cualidades para semental.

Por razones de envejecimiento también han decidido sustituir seis yeguas paridoras con igual cantidad de animales jóvenes, y así mantener las 21 aptas para la gestación, según lo requiere el establecimiento.

Los últimos cuatro animales vendidos, con dos años de edad, fueron muy bien recibidos por sus cualidades físicas y el entrenamiento parcial para usar jáquimas (tipo de bridas) y aparejos, afirma.

Yleidis Ramos Pérez es uno de los responsables de que los animales lleguen predomados a manos de los compradores: El buen trato y la paciencia son sus claves. "Algunas personas dicen que son brutos, pero yo no lo creo así. Cuando les enseñan bien, obedecen con mansedumbre a los arrieros".

MIRANDO HACIA EL CRECIMIENTO CAFETALERO

El Programa Mular del municipio de Sagua contempla 11 patios con 13 burros sementales y 94 yeguas en total, distribuidos en UBPC, CCS y CPA, confirma Orestes Góngora Fernández, especialista en control y atención a la base productiva en la Empresa Cafetalera Sagua .

"De igual forma, los patios prestan atención gratuita a todos los propietarios particulares que llevan a sus yeguas para obtener crías. Así tenemos más de 300 vinculadas con los planes de reproducción, que este año nos permitirán sobrepasar los 200 nacimientos".

La idea es no parar, debido al incremento de la producción cafetalera que experimentará el territorio en el 2015, asegura Góngora, quien recuerda que la cría de mulos beneficia a otros sectores, pues durante los últimos meses la empresa recibió más de sesenta solicitudes de estos para personal médico, trabajadores sociales y funcionarios de correo en los asentamientos serranos.

El crecimiento de la masa mular impone mejorar la atención veterinaria y proseguir las acciones de superación para el manejo adecuado de los animales en los patios de cría y en el proceso de explotación en las entidades productivas, estima Abel Sánchez Perdomo, director de la Empresa Cafetalera Sagua.

"Debemos crear condiciones con el fin de aumentar la producción de aperos para los mulos a partir de esfuerzos propios, como ocurre en las granjas La Zarza y Farallones de Moa.

La alta natalidad, el bajo índice de muertes en el proceso de cría, la sistematicidad de los diagnósticos para determinar la gestación de las yeguas y el cuidado de estas y de los burros sementales, identifican el crecimiento de la masa mular en la provincia, opina Mario Rojas Ávila, especialista en reproducción de la subdelegación de Ganadería en el territorio.

"Como resultado de las medidas organizativas aplicadas y del interés puesto por cientos de personas, en 12 municipios de la provincia existen consolidados 21 patios de yeguas y burros, al tiempo que hay otros 15 que solo aguardan porque los sementales recientemente adquiridos estén aptos para la procreación. No importa dónde esté el patio, la prioridad la tiene el Plan Turquino".

Bien sostenido por la bridas, como ocurre hoy, este programa ofrece seguridad a los pobladores de la serranía, sobre todo a los de parajes intrincados y agrestes, en los cuales el acarreo de café, cacao, viandas y frutas, entre otros productos, depende de las habilidades y la fuerza de los mulos, "los verdaderos camiones de las montañas", como los considera Tomás Javier, el joven orgulloso de criarlos sanos y vigorosos.

 

| Portada  | Nacionales | Internacionales | Cultura | Deportes | Cuba en el mundo |
| Comentarios | Opinión Gráfica | Ciencia y Tecnología | Consulta Médica | Cartas| Especiales |

SubirSubir