Honduras sigue sin superar los efectos del golpe de Estado,
declaró la magistrada salvadoreña Mirna Jiménez, miembro de la
Comisión de la Verdad que investiga las violaciones de los derechos
humanos durante la ruptura institucional, reportó Prensa Latina.
De acuerdo con Jiménez, tras la interrupción violenta del mandato
de Manuel Zelaya, el 28 de junio pasado, se efectuaron elecciones,
en las cuales la mayoría de la población decidió no participar y los
sectores que luchan por volver a la institucionalidad son
reprimidos. Hoy existe una fuerte debilidad en los tres poderes del
Estado y todo eso evidencia, aún más, la crisis institucional en el
país, declaró la jueza en una entrevista publicada en el sitio
digital del Frente Nacional de Resistencia Popular.
Por otra parte dijo- persiste la impunidad y no se ha
investigado, ni castigado, a ninguno de los responsables de las
violaciones de las prerrogativas ciudadanas registradas tras el
golpe de Estado.
Jiménez condenó la represión y el desalojo a las familias
campesinas asentadas en el valle del Aguán, donde según
organizaciones campesinas han sido asesinados al menos 30 labriegos.
Interrogada sobre el regreso de Honduras a la OEA, consideró la
magistrada que mientras no se superen la ruptura institucional y el
irrespeto a la democracia, el país no puede volver a ese organismo,
ni se debe reconocer a un gobierno surgido de la crisis.