La cifra de damnificados por las inundaciones que afectan el este
y sur de Filipinas ascendió a más de 470 mil, informó hoy el Consejo
Nacional de Manejo y Reducción de Desastres.
Según la última actualización, unas 92 mil familias sufren
afectaciones por las constantes lluvias, que han generado 26 muertos
y pérdidas económicas millonarias.
Las islas de Leyte, Samar y Mindanao figuran entre las más
golpeadas por las riadas y los deslizamientos de tierra, reportó
Prensa Latina.
La situación en Mindanao resulta más compleja tras la aparición
de un brote de sarampión, con un saldo preliminar de tres niños
muertos en dos poblaciones rurales.
De acuerdo con autoridades regionales, la llegada de equipos
médicos a localidades intrincadas se ve obstaculizada como resultado
de las desfavorables condiciones meteorológicas.
En medio de tal desgracia, el Servicio Atmosférico, Geofísico y
Astronómico advirtió la víspera que el país sufrirá este año el
impacto de una mayor cantidad de tifones, en comparación con 2010.
Según esa entidad, el incremento está motivado por los efectos
del cambio climático y la acción del evento climatológico La Niña.