Así lo expresó Gladys Bejerano Portela, vicepresidenta del
Consejo de Estado y Contralora General de la República, en la
clausura del XI Taller Nacional de Auditoría, Control y Supervisión,
celebrado el miércoles último en el Memorial José Martí, de la
capital.
Bejerano Portela mencionó otras prioridades para el venidero año,
como continuar promoviendo una cultura de control en las
administraciones y la participación de los trabajadores, con vistas
a lograr las transformaciones indicadas en el Proyecto de
Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la
Revolución.
Expresó que las auditorías al presupuesto recién concluidas
fueron un reto para la CGR, pero los resultados ayudarán a mejorar
la eficiencia en administración y control, con la colaboración de
los ministerios de Finanzas y Precios, de Economía y Planificación,
y de Trabajo y Seguridad Social, así como de la Asociación Nacional
de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC).
La Contralora General reiteró el compromiso de la CGR de accionar
con mayor celeridad ante los problemas, impulsar el trabajo
preventivo, cohesionar el Sistema Nacional de Auditoría y
profundizar los análisis en cuanto al uso de los recursos. Precisó
que el control interno es el modo de organizar y dirigir cada
entidad, no solo en sus aspectos contables y financieros, sino
integralmente, y "no compite con otros procedimientos, sino los
armoniza para hacer avanzar la actividad de que se trate", precisó.
Con el Taller Nacional culminó un proceso desde la base realizado
de julio a septiembre con las provincias, auspiciado por la CGR y la
ANEC, en el cual se presentaron 153 ponencias, de las que fueron
seleccionadas 10 para la instancia nacional.
Profesionales y académicos de Guantánamo, Holguín, Granma,
Camagüey, Sancti Spíritus, La Habana, Villa Clara y Cienfuegos
participaron en el evento.