Para quienes gustan disfrutar de la bóveda celeste y sus eventos
astronómicos, el 2011 será un año interesante, ya que tendrán lugar
cuatro eclipses de sol y dos de luna.
El 4 de enero próximo se producirá el primer fenómeno, un eclipse
parcial de sol, visible desde toda Europa, norte de África y el
oeste de Asia, y durante el cual la luna cubrirá más de la mitad de
la superficie solar. Sin embargo, los que puedan observarlo, deberán
madrugar, ya que iniciará justo antes del amanecer, reporta Prensa
Latina.
Otro evento similar acontecerá el 1 de junio, y serán los
habitantes del este de Asia, Norteamérica, Groenlandia e Islandia
los más favorecidos con el espectáculo.
Los especialistas recuerdan que la observación del disco solar
sin tomar las correctas precauciones es extremadamente peligrosa, ya
que puede ocasionar daños oculares irreversibles. Por lo tanto no se
debe mirar nunca directamente al sol sin una protección adecuada.
Por otra parte, la luna quedará también opacada por dos eclipses,
uno, el 1 de julio, que podrá ser visto en el sur del océano Índico
y otro, el 25 de noviembre, desde Sudáfrica, Antártida, Tasmania y
el oeste de Nueva Zelanda.
El pasado 21 de diciembre parte del planeta pudo disfrutar de un
bello espectáculo, un eclipse total de luna, que coincidió además
con el solsticio de invierno en el hemisferio norte, cuando
transcurre el día más corto y la noche más larga del año.
De acuerdo con especialistas del Observatorio Naval de los
Estados Unidos, que inspeccionó una lista de los eclipses de los
últimos dos mil años, un hecho similar no ocurría desde el 21 de
diciembre 1638.
Sin embargo, añade que no habrá que esperar 372 años para otra
coincidencia, que será el 21 de diciembre 2094.