El primer ministro designado Nouri Al-Maliki aplazó hoy el anuncio del nuevo Gobierno de Iraq, cuya formación ha estado marcada por disputas de carteras entre los distintos grupos políticos con asiento parlamentario.

Un asesor de Al-Maliki, a quien el reelecto presidente Jalal Talabani encargó hace poco más de un mes crear un Ejecutivo de unidad, explicó que la información sobre los nuevos ministros podría conocerse esta misma noche.

Las autoridades iraquíes tenían previsto proclamar a primeras horas de este lunes la distribución de puestos en el gabinete, pero los conflictos de fechas dejan todavía abierta la posibilidad de que el anuncio se posponga para mañana o el miércoles, aunque el plazo límite expira el sábado.

El nuevo equipo que encabezará el chiita Al-Maliki estará formado por otros 41 miembros entre los que se espera estén incluidos representantes de las principales coaliciones étnico-políticas de esta nación mesopotámica, a saber, árabes chiitas y sunnitas, así como kurdos.

Los ministerios del Interior, Defensa y Seguridad Nacional quedarán vacantes por ahora debido a la sensibilidad que suscitan esos puestos clave y la necesidad de consenso, según argumentó el diputado Khalid Al-Assadi, de la coalición Estado de Derecho (ED) que lidera Al-Maliki.

De acuerdo con las normas vigentes aquí, ese gabinete deberá ser aprobado por los 325 diputados al Parlamento en un plazo de cinco días, lo cual parece probable después de que el líder de la alianza opositora Al-Iraqiya (AI), Iyad Allawi, adelantó que se unirá al Ejecutivo de unidad nacional.

Allawi fue el principal rival de Al-Maliki y le venció en las elecciones parlamentarias del pasado 7 de marzo con 91 escaños, dos más que la coalición ED, pero fue relegado a raíz de pactos entre el gobernante y otros partidos religiosos chiitas, así como un sector de los kurdos.

Al-Assadi explicó que la Alianza Nacional, que aglutina a ED y los demás grupos chiitas favorables al primer ministro, controlará 17 carteras del gobierno, mientras AI se encargará de nueve, la Alianza del Kurdistán retendrá siete y el resto se las repartirán los bloques más pequeños.

Iraq permanece sin gobierno efectivo desde entonces, y se espera que el anuncio previsto inicialmente para hoy ayude a estabilizar la vida política, económica y social del país, drásticamente alteradas tras la invasión militar de Estados Unidos, en marzo de 2003.