Bolivia es uno de los países latinoamericanos que más redujo la
desigualdad y la pobreza en la última década, reconoció la Comisión
Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), divulgan hoy
medios estatales.
Argentina, Brasil y Venezuela forman parte también del listado de
los que lograron quebrar los elevados índices de iniquidad legados
por el neoliberalismo en el área, considerada ahora como una región
progresista, informó Prensa Latina.
Los gobiernos progresistas nos dejan un legado muy positivo donde
no hay marcha atrás en las políticas sociales (...) El gasto social
no se pierde, sino que es el motor de la economía, afirmó la
secretaria ejecutiva de Cepal, Alicia Bárcena, citada por el diario
estatal Cambio.
Bárcena calificó de crucial la función del Estado como agente
propiciador del desarrollo, aunque advirtió sobre la necesidad de
alentar pactos sociales con sectores productivos, porque tampoco el
Estado sólo puede hacer todo.
En opinión de la especialista mexicana, la única forma para salir
de la desigualdad es el empleo con derechos y protección y es
urgente saldar la deuda de la inversión del Estado en ciencia y
tecnología para el desarrollo.
La región debe aprovechar sus mercados internos. Países con
grandes mercados internos como Argentina, Brasil, Colombia y México
deberían convertirse en los grandes motores del crecimiento
regional, porque si crecen, crecerán las economías a su alrededor,
añadió.
Bolivia alcanzó un superávit fiscal este año como en los cuatro
anteriores, con un crecimiento aproximado del Producto Interno Bruto
real de 3,64 por ciento y un aumento de los ingresos por persona,
debido a la aplicación de políticas gubernamentales de
redistribución, entre otros.