El índice de desempleo estadounidense subió en noviembre a 9,8
por ciento, para enrumbarse peligrosamente hacia las temidas dos
cifras.
Según un informe del Departamento de Trabajo, divulgado este
viernes, la economía pudo generar sólo 39 mil puestos de trabajo,
mientras que más de 276 mil personas perdieron sus ocupaciones,
reporta Prensa Latina.
El nivel fue peor que lo esperado por lo analistas, quienes
pronosticaron un 9,7 por ciento, después de tres meses consecutivos
mantenido en 9,6.
También los pedidos iniciales de subsidio por desempleo subieron
más de lo esperado en la última semana, según revelaron fuentes
oficiales.
Señalaron que las solicitudes treparon a 436 mil, superior a los
425 mil esperado por los analistas.
El subsidio para los parados normalmente cubre hasta 26 semanas
pero, en medio de la peor recesión desde los años 30, el gobierno
tuvo que extenderlo, en algunos casos, hasta 99 semanas.
Sin embargo, más de dos millones de desempleados quedarán
desamparados a fines de este mes, pues la falta de acuerdos en el
Congreso de Estados Unidos, impidió la prolongación de esa
asistencia.
Lo cierto es que desde el inicio de la crisis global, hace casi
tres años, la economía estadounidense perdió unos ocho millones de
puestos.
Analistas estiman que la tasa de cesantía real ronda el 17 por
ciento.
Esa última categoría, no contemplada en la población
económicamente activa, incluye a quienes abandonaron la búsqueda de
trabajo o laboran a tiempo parcial por el pesimismo existente.