Se prevé que en el término de un año se entreguen estas
soluciones habitacionales, a la vez que ratificó el compromiso del
Estado con las familias damnificadas.
El mandatario aseguró que todo su equipo ministerial se hará
cargo del proyecto y pidió a las 605 familias del refugio Fabricio
Ojeda, al oeste de Caracas, que "no vuelvan a la zona de riesgo a
esperar el próximo invierno (no duden), yo me pongo al frente de
esta operación para darles a todas las familias su vivienda digna,
cueste lo que cueste".
En este sentido, el Jefe de Estado solicitó a todos los
habitantes de los sectores en riesgo, abandonar sus casas para
acudir a los refugios, dispuestos en instalaciones militares y
gubernamentales, donde los damnificados reciben un trato
humanitario.
El dignatario añadió que los operativos de rescate ejecutados por
las autoridades en las últimas horas brindaron resultados positivos,
y dijo que aún se encuentran desplegados más de 6 000 soldados de
las Fuerzas Armadas y efectivos de Protección Civil para atender la
emergencia decretada en los estados Falcón (noroccidente), Vargas,
Miranda y Distrito Capital (centro-norte).
Chávez pidió el esfuerzo conjunto de todas las autoridades para
enfrentar el desastre climático, sin importar la afiliación
política, pues el objetivo es "unirse por la vida".
En ese sentido, solicitó a los damnificados paciencia y poner por
delante la solidaridad, "pues primero recibirán vivienda los más
necesitados, para trabajar, vivir bien erradicando la delincuencia,
la droga, el alcoholismo y demás problemas heredados del
capitalismo", añadió.
Al respecto, declaró que "la lucha en estos momentos de
emergencia no es contra la naturaleza, sino contra el capitalismo",
según PL.
El gobernante fue enfático al afirmar que todos los logros que se
alcanzarán para apoyar a los afectados son posibles gracias al
Socialismo "que tomó los recursos de la burguesía y los rescató para
el pueblo", agregó.
Mientras tanto, el jefe del Comando Estratégico Operacional
(CEO), general en jefe Henry Rangel Silva, señaló que se sigue
trabajando para retomar la calma en el resto de los departamentos
afectados, indicó la AVN.
El número de fallecidos por las fuertes lluvias de los últimos
días se elevó este jueves a 31, mientras que los damnificados son 71
849, de acuerdo con el último balance ofrecido por el ministro de
Interior y Justicia, Tareck El Aissami.
Desde el estado de Falcón, el más golpeado por las
precipitaciones, el titular añadió que tres personas permanecen
desaparecidas producto de la crecida de los ríos e informó que el
Gobierno se mantiene en una exhaustiva búsqueda.
El Aissami indicó que se habilitaron 319 refugios en toda
Venezuela y 78 en el estado Falcón "para garantizar la alimentación,
la hidratación y asistencia médica en conjunto con la delegación
cubana".
Al respecto, la ministra de Salud, Eugenia Sader, comunicó que,
pese a la alarmante situación, no existen brotes epidémicos en los
diferentes estados del norte del país afectados.
"Podemos informar con tranquilidad que en estos momentos se ha
desplegado un operativo en el que nos unimos todo el personal de
salud, para brindar la atención médica necesaria", declaró Sader a
Telesur.
La funcionaria explicó que los médicos de la red tradicional, de
la Misión Barrio Adentro y del Batallón 51 —este último conformado
por doctores jóvenes formados en Cuba en la Escuela Latinoamericana
de Medicina—, laboran en la atención de los afectados por las
precipitaciones.
Aseguró que este grupo de profesionales de la salud "ha abordado
los diferentes centros de refugiados para evitar la propagación de
cualquier enfermedad" y además "está cumpliendo el rol preventivo",
informando a los habitantes sobre las medidas de higiene que deben
cumplirse.
Sobre la situación de los hospitales en las zonas afectadas,
Sader también precisó que, en lugar de generar un aumento de
enfermos en esos centros de salud, los organismos correspondientes
reportaron un decrecimiento de casos.
Por otro lado, manifestó que la salud psicológica de los
damnificados también ha sido atendida en el operativo, especialmente
la de los niños.
Precisó que a los más pequeños se les están dictando jornadas
especiales tanto educativas como recreativas, "para hacerles lo más
grato posible el conflicto y evitar que la situación les produzca
traumas".