"Nunca me lo propuse como meta" —admite con voz y tono delicados.
Y añade: "Me presenté aquí, en mi preuniversitario Luis Urquiza
Jorge, en el encuentro provincial en Las Tunas y por último en el
concurso nacional, allá en Ciudad de la Habana, donde también gané¼
Primero nos dictaron diez oraciones a todos los concursantes y luego
20 palabras sueltas. La estudiante guantanamera y yo obtuvimos 100
puntos, pero me concedieron a mí el primer lugar por haber empleado
menos tiempo."
—¿Y los nervios¼ ?
"Se me dispararon, pero también estuve segura de mis
conocimientos. Recuerdo que el profesor Gilberto Guevara, quien me
preparó y me acompañó al concurso, llamó a la escuela y a mis
familiares, en el municipio de Amancio Rodríguez, para darles la
noticia. Creo que él estaba tan contento como yo¼
"
Tal reacción era lógica. En Lisandra se había concentrado la
esperanza de que el referido preuniversitario de Las Tunas
conquistara por cuarta ocasión el primer lugar nacional de ese
difícil examen, que ya acumula 11 años.
En opinión de Gilberto, la fortaleza de Lisandra está en su
seguridad, en sus mecanismos para responder rápidamente, trabaja muy
bien con el diccionario, tiene destreza para conducirse, una sólida
base, gran facilidad para incorporar palabras nuevas, dominar su
significado y asociarlo a la escritura, aunque esos términos tengan
un origen muy culto o demasiado técnico.
Tras una pregunta, la joven de mirada asiática, sonríe levemente
y expresa:
"Debo mi buena ortografía a la lectura. Desde niña me gustó leer
libros de cuento, aventuras; después he seguido leyendo sobre
historia y otros temas. También uso bastante el diccionario, acudo a
él cada vez que encuentro una palabra que no conozco."
—¿Consideras que ese es el mejor camino hacia una buena
ortografía?
"Pienso que sí, y también es importante atender al profesor
durante las clases. Si todos hiciéramos eso no habría tantos
problemas con la escritura, con los signos de puntuación o con la
redacción, incluso entre quienes prefieren la bioquímica, como yo, u
otras ciencias."
—¿Algún temor frente al reto de Montevideo?
"Será una prueba dura, pero siento seguridad. Continuaré
preparándome y aunque me gustaría ganar, no me aferraré ciegamente a
esa idea. Voy a poner toda mi capacidad para realizar allá una buena
actuación y situar lo más alto posible el nombre y el prestigio de
Cuba."