Cerca de 50 millones de estadounidenses, entre ellos 17 millones
de menores de edad, enfrentan la amenaza del hambre, indican cifras
del departamento de Agricultura, reporta Prensa Latina.
Estas personas carecieron en algún momento del último año de la
alimentación adecuada, precisa la entidad. Una de cada seis enfrenta
el riesgo de pasar hambre, entre estas muchos menores de edad,
agrega.
Las estadísticas fueron divulgadas cuando el país celebra una
festividad tradicional, el Día de Acción de Gracias, en el cual las
comidas y banquetes son protagonistas en muchos hogares.
La situación es mucho más crítica para los más de 14 millones de
personas que representan el 9,6 por ciento de la fuerza laboral
desempleada del país, en cuyos hogares tal vez falte el banquete de
ocasión.
Desde hace varios años, los programas de cupones de alimentos y
otras ayudas enfrentan los efectos de la crisis económica y
continuos recortes de sus fondos, que varían en función de la agenda
política de los republicanos o demócratas, según quien gobierne en
la Casa Blanca.
Instituciones federales y grupos defensores de los derechos
humanos han advertido que la sostenida crisis económica que enfrenta
la nación llevó al borde de la pobreza y el hambre a muchas
personas.
Llama la atención que el Congreso no renovó aún la Ley de
Nutrición Infantil, que destina fondos a programas alimenticios en
escuelas, entre otras asistencias, lo que ahora enfrentará mayor
resistencia de los republicanos, empeñados en disminuir los gastos
del gobierno del presidente Barack Obama.