WASHINGTON,
26 de octubre.— Los gastos de los candidatos para el Congreso de
Estados Unidos ascenderán a 2 000 millones de dólares en los
comicios de medio término del próximo 2 de noviembre, proyectó hoy
la organización Public Campaign Action Fund.
En la Cámara de Representantes, los candidatos recaudarán casi 1
300 millones de dólares y gastarán más de 1 400 millones, en
contraste con los casi 1 000 millones de dólares recaudados en los
comicios presidenciales del 2008, señaló.
La organización basó sus datos en un análisis del Center for
Responsive Politics y en un informe del diario The Washington Post,
que indicó que los candidatos para el Senado están en camino de
recaudar y gastar más de 500 millones de dólares.
"Los candidatos están recaudando más dinero en el 2010 que nunca
antes y gastándolo más rápidamente que en el 2008", opinó David
Donnelly, director del proyecto Campaign Money Watch, que pertenece
al Public Campaign Action Fund. Agregó que con los anuncios de
ataques políticos, los candidatos tienen que pasar más tiempo
recaudando dinero "y menos tiempo hablando con los votantes. Tienen
que alimentar a la bestia, que es la interminable recaudación y
gastos para las campañas, que está devorando nuestra democracia",
lamentó.
Los candidatos republicanos a la Cámara baja recaudaron
aproximadamente 30 millones de dólares más que los demócratas en el
tercer trimestre del 2010. En el 2008 por estas fechas, los
republicanos habían recaudado casi 64 millones de dólares menos,
indicó el informe.
Donelly dijo que la creciente recaudación de fondos por parte de
donantes pudientes, sumado a donaciones secretas, "está poniendo las
elecciones en las manos de unos pocos estadounidenses". Al margen de
lo que ocurra el 2 de noviembre, el Congreso debe regresar a
Washington y "abordar inmediatamente el problema del dinero de
grupos de intereses especiales" aprobando una ley que permita mayor
transparencia, expresó.
El diario The Washington Post informó este martes que grupos de
intereses especiales podrían gastar 400 millones de dólares para
atacar a candidatos demócratas vulnerables. (CubaDebate/Notimex)