La educación inclusiva es una opción para revertir el contexto de
desigualdad social, cultural y económica, coincidieron hoy los
participantes en el Primer Encuentro Internacional de Educación
Alternativa y Especial, en Bolivia.
Un homenaje a la senadora boliviana Ana María Romero, fallecida
la víspera, marcó el inicio de esta segunda jornada, en la que
delegados de más de una decena de países debatieron sobre la
diversidad como vía para la interculturalidad
En términos de identidades, lo plural, lo diverso nos enriquece.
Debemos buscar creciente igualdad, comunicarnos, respetar y
reconocer los otros logros de otras culturas, expresó el sacerdote y
antropólogo Xavier Albó.
Para el expositor, la educación es importante desde la escuela,
pero también desde la familia y a partir del intercambio entre los
seres humanos, porque compartir ayuda mucho.
Cuando las personas se juntan comparten y elemento fundamental
para éste proceso es la comunicación, como en éste tipo de eventos y
usando otros medios más sofisticados, consideró.
Albó instó a las personas con limitaciones a asumirse como
personas normales y a insertarse en la sociedad para ser miradas con
respeto por el resto: nosotros tenemos que intentar descubrir que no
somos personas con discapacidad, afirmó.
La senadora boliviana Rinha Aguirre recordó su exilio en Ecuador
en los años de la dictadura y aseguró que nunca pensó llegar hasta
el ente parlamentario y ser parte de un cambio tan radical en
Bolivia.
Conozco la época donde no se podía decir nada, enfatizó Aguirre,
para quien es un privilegio que compartamos el sueño de éste Estado
plurinacional y de poder compartir proyectos tendientes a
revolucionar la educación y la cultura.
Los exponentes en esta jornada concordaron en la significación
del estudio para propiciar el debate entre los educandos acerca de
los problemas de su país, con sus propias experiencias.