El gobierno japonés aprobó hoy un presupuesto adicional para este
año fiscal a fin de financiar un plan con el cual espera estimular
una economía afectada por la apreciación del yen y la deflación.
La nueva asignación de fondos, de 62 mil millones de dólares,
será presentada a la dieta (parlamento) el próximo viernes para su
análisis, informó Prensa Latina.
Según se explicó, el equipo del primer ministro, Naoto Kan,
financiará esta iniciativa con recursos excedentes del año fiscal
anterior y otros disponibles por pagos de intereses sobre la deuda
menores a lo previsto, entre otras fuentes.
De esta forma el jefe de gobierno ratifica su rechazo a financiar
el plan con la emisión de bonos y así evitar un incremento de la
enorme deuda pública del país, la más alta en el mundo
industrializado.
Esta inyección de fondos se suma a una cercana a los 11 mil
millones de dólares aprobada el mes pasado con vistas a reanimar una
economía golpeada por el desempleo, la deflación baja generalizada
de los precios- y merma en las exportaciones.
Objetivos básicos del plan son promover el aumento de la demanda
y mejorar el entorno empresarial.
La tercera economía mundial enfrenta como nuevo problema la
apreciación de su divisa, con lo cual las exportaciones se hacen
menos competitivas al encarecerlas, mientras disminuye el valor de
las ganancias al repatriarlas.
El ministerio de finanzas informó ayer que el yen se fortaleció
el mes pasado alrededor del nueve por ciento frente al dólar
respecto a igual etapa anterior.