Guatemala respira hoy aliviada porque el huracán Richard,
degradado después a tormenta tropical, no añadió más daños a los
sufridos este año por varios fenómenos naturales, informó Prensa
Latina.
Alejada ya del territorio nacional, esa perturbación trajo
lluvias sobre la parte norteña del país, sobre todo en dos
municipios del departamento de Petén, fronterizo con México (oeste)
y Belice (este) donde más golpeó.
Aunque Richard se fue ya sin fuerza, la Coordinadora Nacional
para la Reducción de Desastres (CONRED) y el Instituto Nacional de
Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH)
prosiguen su seguimiento.
Para evitar cualquier imprevisto la CONRED mantiene las alertas
anaranjada institucional y amarilla poblacional, con las cuales
previenen a la población de riesgos y amenazas que puedan
presentarse.
Estas son medidas imprescindibles en un país considerado por la
ONU el cuarto más vulnerable del mundo ante desastres naturales,
condición corroborada en 2010.
Primero fue la violenta erupción del volcán Pacaya y luego el
azote de la tormenta tropical Agatha, con apenas horas de diferencia
a finales de mayo pasado.
Aún sin poderse recuperar desde ningún punto de vista, esta
nación siguió bajo el influjo de una época lluviosa sin precedentes
en los últimos 60 años, que en el orden humano dejó 274 víctimas
mortales.
En el material, representantes de varios organismos
internacionales valoraron las pérdidas en apenas tres-cuatro meses
por encima de los mil 300 millones de dólares.
La infraestructura vial y la agricultura fueron de los sectores
más golpeados por esos desastres, sin olvidar viviendas, escuelas y
otras instalaciones sociales con serias dificultades.
Esa situación, que provocó la declaración y sucesivas prórrogas
del Estado de Calamidad para todo el país, es demasiado sensible
como para llevar consuelo a los guatemaltecos cuando otra tormenta
más haya pasado sin dejar daños palpables.
Sin embargo, los suelos están sobresaturados por tanta agua
recibida en este tiempo y la CONRED sigue alertando acerca de
posibles derrumbes de tierra, principal causa de los fallecimientos
en el periodo.
Por su parte, el INSIVUMEH pronosticó, para el transcurso de esta
semana, nublados parciales, lloviznas o precipitaciones pluviales
más fuertes en regiones norteñas y caribeñas, por lo cual instó a la
población a un máximo de atención a las condiciones meteorológicas.