A pesar de las continuadas informaciones sobre negociaciones con
los talibanes, en la sureña provincia afgana de Herat una bomba
causó la muerte de cuatro policías.
Aunque los insurgentes no se acreditaron aún dicho atentado,
fuentes oficiales de Herat señalaron que es característico de esas
fuerzas, las cuales se enfrentan en esa localidad y otras regiones
del sur a las tropas ocupantes de la OTAN.
Mientras, la confusión sigue reinando sobre las negociaciones,
sin definirse fecha y lugar, bajo estricto anonimato de las partes,
tanto de los insurgentes como de la Organización del Atlántico del
Norte (OTAN) y del gobierno de Hamid Karzai, reporó Prensa Latina.
Ahmad Wali Karzai, hermano del presidente afgano y controlador de
la zona de Kandahar, afirmó a The Times que "quienes quieren hablar
con los talibanes tienen que asegurarse de que tienen el visto bueno
de los paquistaníes y, mientras estos permanezcan al margen, no se
va a hacer nada."
A su vez, el portavoz talibán, Zabiullah Muyahid, afirmó:
"rechazo totalmente que estén negociando talibanes de alto rango. No
vamos a negociar hasta que las fuerzas extranjeras abandonen el
país", enfatizó.
Otras fuentes de los insurgentes han señalado que no menos de 300
líderes de grupos insurgentes han muerto en enfrentamientos con las
tropas ocupantes en los últimos tres meses y esa situación pone en
peligro cualquier intento negociador.