Fotos, reconocimientos y condecoraciones otorgadas al compositor
y guitarrista Rafael Rodríguez Muñoz (1910-1999) conforman la
exposición inaugurada hoy en Sancti Spíritus, en el año de su
centenario.
Reconocido como el último trovador de la vieja guardia
espirituana, Rodríguez Muñoz se convirtió en símbolo de la trova
tradicional con sus cerca de 150 obras, donde la mujer y los rasgos
criollos afloran en cada verso, al decir de Juan Enrique Rodríguez
Valle, musicólogo y periodista.
Siete cuadros de gran tamaño, en los que destacan instantáneas
tomadas entre familiares y amigos y la Distinción por la Cultura
Nacional, conforman la muestra montada en la Casa de las Promociones
Musicales de la Villa del Yayabo, tierra amada por el autor de
"Nuestras Almas".
Durante años, las composiciones de Rafael, integrante del Trío
Miraflores, estuvieron inéditas, hasta que a finales de la década de
1990 se inauguró el Proyecto Nuestras Almas, destinado a rescatar
del olvido sus melodías y que hasta la fecha tiene 58 piezas listas
para interpretar.
Lorenzo Isabelán Rodríguez Pérez e Iliana Rodríguez Domínguez
-hijo y nieta de Rafael, respectivamente- son los encargados de
recopilar las letras y además los principales artífices de la
exposición que permanecerá abierta al público por espacio de un mes.
En tierras yayaberas es común escuchar las antológicas obras
musicales de Rafael Rodríguez Muños, gracias a los empeños de Rosa
Lidia Rodríguez Bello, nieta también del trovador y que dirige desde
hace más de una década el Dúo Nuestras Almas.