SANTIAGO
DE CHILE, 17 de octubre.— Trece de los 33 mineros chilenos que
regresaron hoy al campamento Esperanza en las afueras de la mina San
José, para conocer cómo vivieron sus familias los 69 días que demoró
su rescate y participar en una misa, se encontraron con una protesta
del resto de los obreros que trabajaban en esa veta y sus
familiares, quienes reclaman sueldos y finiquitos, indicó AFP.
En los instantes en que se iniciaba la misa de acción de gracias
organizada por las autoridades de la zona y familiares de los
mineros rescatados, los manifestantes —trabajadores de la minera San
Esteban, propietaria del yacimiento San José— sacaron varias
pancartas y tuvieron un pequeño incidente con los Carabineros que
resguardaban la zona, refiere EFE.
"San Esteban, no somos 33, somos 300", "Atrapados en la
superficie", "70 días sin trabajo y sin dinero", "Refugio Esperanza,
los desamparados", se podía leer en algunos de los carteles que
portaban los mineros que tras el derrumbe en el yacimiento San José
quedaron sin su fuente laboral.
"Nos deben sueldos y no nos han entregado el finiquito, lo que
nos impide buscar otro trabajo", reclamó el presidente del sindicato
de trabajadores de San José, Horacio Vicencio.