La
Historia me absolverá, que cumple este sábado 57 años de pronunciada
por Fidel Castro en el juicio por el asalto al Cuartel Moncada, fue
también una de las obras iniciadoras de la producción sistemática en
Cuba de libros en Braille.
Ese alegato fue publicado mediante el método de puntos en relieve
hace 23 años por la editorial José Martí, y hoy puede encontrársele
en bibliotecas y áreas especiales de lecturas para ciegos existentes
en los principales núcleos poblacionales del país, reporta la AIN.
Con anterioridad, ese documento fue trascrito al procedimiento de
lectura al tacto en máquinas de escribir por copistas invidentes de
la biblioteca Raymundo Cabrera, de la escuela para ciegos Varona
Suárez, única existente en la Isla al triunfo de la Revolución.
El otro título iniciador de esa producción fue la Edad de oro, de
José Martí, el cual se imprimió en cuatro tomos, para beneplácito de
los niños que comenzaban ya a leer.
Actualmente funcionan en Cuba dos imprentas en ese sistema, una
de la Asociación Nacional del Ciego y la otra del Ministerio de
Educación, las que realizan verdaderos esfuerzos para superar las
dificultades impuestas por el bloqueo de Estados Unidos a Cuba.