"Este es el precio que tenemos que pagar muchos por luchar por la
paz, por la libertad de los cautivos, por los secuestrados y por las
secuestradas", dijo en una conferencia de prensa.
La investigación contra la senadora se originó en los archivos
encontrados en los computadores del comandante de las FARC, Fuerzas
Armadas Revolucionarias de Colombia, Raúl Reyes, muerto en marzo del
2008 en un bombardeo de militares colombianos en una zona selvática
de Ecuador.
Córdoba dijo que las liberaciones de personas que estuvieron
secuestradas por años por las FARC, son el testimonio de su trabajo
humanitario a favor de la paz.
"No se puede criminalizar la tarea humanitaria", declaró la
senadora, quien aseguró que pese al fallo no se siente muerta
políticamente.