Altos mandos militares de cuatro
países norafricanos tratan de diseñar una estrategia contra la
organización Al Qaeda en Maghreb Islámico (AQIM), a la que califican
de terrorista y responsabilizan por varios secuestros.
El encuentro se realizó el domingo en el sur argelino, aunque
sólo trascendieron los países asistentes: Malí, Mauritania,
Níger,además del anfitrión, y un escueto comunicado según el cual
los asistentes intercambiarán información para establecer una
estrategia conjunta contra el terrorismo y el crimen organizado.
Sin embargo, es probable que los jefes militares hayan escuchado
las quejas argelinas por el hecho que algunos gobiernos de la zona y
de Europa han accedido a negociar la liberación de rehenes a cambio
de rescate en metálico o liberación de detenidos.
Miembros de AQIM son sindicados como los secuestradores de siete
súbditos extranjeros a los que se supone prisioneros en algún lugar
del Sahara.
A pesar de su nombre, AQIM asegura que carece de lazos con Al
Qaeda, la entidad fundada por el saudita Osama Bin Laden.
La reunión se efectuó a nivel de jefes de Estado Mayor y llamó la
atención la ausencia de una representación de Túnez, cuyo Gobierno
tiene una política de tolerancia cero contra los partidos políticos
con plataforma confesional y, por ende, con entidades como la AQIM.