Cuba se destaca en el contesto iberoamericano por el presupuesto
destinado a la educación, uno de los grandes logros del proyecto
social de la Isla, tomado como modelo por entidades de la
Organización de Naciones Unidas.
La prioridad que concede la Ínsula a ese campo fue destacada en
la reunión de ministros de Educación de Iberoamérica, reunidos hoy
en Buenos Aires, donde datos difundidos en el foro indican que la
nación caribeña emplea 13,6 por ciento de su producto interno bruto
(PIB) a mantener su sistema educacional gratuito y universal.
Igualmente, fueron destacados Bolivia, con 6,3 por ciento, y
Brasil, con 5,2, frente a Perú y Uruguay, que rebasan ligeramente el
dos por ciento, precisa una información difundida por la agencia
española EFE.
En la reunión de la capital argentina, la propuesta de Metas
Educativas 2021, implica invertir 100 mil millones de dólares para
que los sistemas de enseñanza de la región den un vuelco
cuantitativo y cualitativo en la próxima década.
Ello supondría que los recursos destinados a educación pasarían
del 5,1% al 5,5% del PIB, según el acuerdo, que deberá de aprobarse
definitivamente en la próxima Cumbre de Jefes de Estado y de
Gobierno de Iberoamérica, de diciembre próximo.
Las mejoras incluyen universalizar el acceso a la educación
básica y aumentar la permanencia en las escuelas y el rendimiento
académico, las que deberán sustentarse en programas sociales
compartidos, para que tengan éxito completo, de acuerdo con la
propuesta.
Entre los objetivos generales, figuran universalizar la enseñanza
básica equitativa e inclusiva, acabar con el analfabetismo -que
abarca a 34 millones de personas-, con la deserción escolar y, de
manera relacionada, con el trabajo infantil (10 por ciento de los
niños de primaria).
Cuba, que puso fin al analfabetismo en 1961, ha desarrollado
métodos contra ese flagelo, probados con éxito en numerosos países
iberoamericanos, como Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua, así
como en otras partes del mundo.