Actualizado 10:00 a.m. hora local

En Las Tunas priorizan fabricación de
implementos agrícolas

HERNÁN BOSCH

Con la fabricación de 110 arados y más de 90 cultivadoras, los obreros de los talleres "13 de Marzo", de la provincia cubana de Las Tunas, sobrepasan sus metas en lo que va del presente año.

La producción cada vez más abundante de estos implementos, unida a la de carretas para el traslado de semillas, agua y otros insumos, es prioritaria en el esfuerzo que realiza Cuba para impulsar el empleo de la tracción animal en las labores agropecuarias.

El colectivo de la entidad también reparó más de 280 agregados de la maquinaria usada en la agricultura, con lo cual superó en el 83 por ciento su meta para la etapa, dijo a la AIN Wilson Ramírez, director de la Empresa de Talleres Agropecuarios, Desmonte y Construcción en Las Tunas, 670 kilómetros al este de La Habana.

Estas producciones y reparaciones tienen en conjunto un valor superior a los 316 mil pesos y, aunque aún no satisfacen todas las necesidades, contribuyen al empeño del país por avanzar en la disminución de las importaciones de implementos y equipos agrícolas.

José Antonio Segura, funcionario de la Subdelegación de Mecanización de la Agricultura en el territorio, dijo recientemente a la AIN que sólo de enero a julio, en los ocho municipios tuneros se economizaron más de 480 toneladas de combustibles mediante el empleo de la tracción animal.

Explicaba Segura que, entre otras tareas, en el período se prepararon para la siembra unas 37 mil 300 hectáreas y se plantaron más de 42 mil con el uso de los animales, además de trasladarse cerca de 13 mil toneladas de semillas, fertilizantes y productos cosechados.

En la actualidad el sostenido incremento del uso de la tracción animal resulta de singular importancia a nivel mundial, debido a que la crisis económica provoca escasez y encarecimiento de los combustibles y otros recursos.

Sin embargo, el ahorro no es el único motivo para promover la utilización de animales de tiro, pues el empleo de los bueyes y caballos en labores agrícola contribuye a preservar el ecosistema debido a que no compactan los suelos ni los contaminan con derrames de combustibles y lubricantes, como sucede con las máquinas.

 

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