En la actualidad el virus causante de la influenza A H1N1 tiene
"una muy baja circulación" en el país, aunque aún se registran casos
aislados de la enfermedad, indicó ayer a Granma el doctor
Antonio Marrero Figueroa, integrante del Grupo Nacional de
Enfermedades Respiratorias del Ministerio de Salud Pública.
El mundo, como ha planteado la OMS, se encuentra ahora en el
período pospandémico en el que el A H1N1 sigue en circulación como
parte de la influenza estacional.
La temporada de gripe estacional en nuestro país presenta cada
año un alza desde el mes de septiembre hasta marzo o abril, y aunque
mayoritariamente cursa de manera benigna, Marrero subrayó el hecho
de que la influenza y la neumonía se sitúan entre las primeras cinco
causas de muerte en nuestro medio, lo que representa un llamado a no
descuidar la atención médica de las afecciones respiratorios, sobre
todo en los grupos de alto riesgo: niños pequeños, ancianos,
embarazadas y personas con enfermedades crónicas.
Por ello las autoridades de Salud recaban de la población
mantener como parte de nuestra cultura "las lecciones sanitarias
aprendidas" en cuanto a la responsabilidad individual y colectiva en
la prevención y solicitud de tratamiento ante manifestaciones de
agravamiento, como la falta de aire, taquicardia y rechazo a los
alimentos en los niños menores.
La gripe es una infección vírica aguda que se transmite
fácilmente de una persona a otra, por lo que para evitar el contagio
hay que lavarse las manos regularmente y cubrirse la boca y la nariz
al toser o estornudar.
En junio del 2009, la OMS declaró que una nueva cepa de la
influenza porcina había aparecido en Estados Unidos y México y se
expandió por el mundo en seis semanas, lo que provocó la primera
pandemia de gripe desde 1968.
El A H1N1 desplazó a otros virus gripales y se convirtió en el
predominante. Ya no es así, pues muchos países, entre ellos Cuba,
notifican la presencia de una mezcla de virus gripales, como suele
ser característico en las epidemias estacionales.