Cuba, quinta olímpica en la cita del deporte joven
El saldo de preseas (10-3-2) la ubicó a la cabeza
de América entre 205 países participantes
HAROLD IGLESIAS
Tocar el Olimpo con las manos, besar una medalla dorada, entonar
el himno de tu país, saberte el mejor bajo la bandera de los cinco
aros...
Sensaciones que rondan incisivamente la mente de cualquier atleta
hasta no verlas materializadas. Antes, solo posible cada cuatro años
al máximo nivel en Juegos Olímpicos. Ahora, real entre los nacientes
campeones con la cita estival juvenil de Singapur, excelente
termómetro para saber cómo anda el futuro, y evento donde Cuba
rindió una excelente actuación con 10 metales áureos, tres de plata
y dos de bronce, que le valieron el quinto lugar entre 205 países
participantes.
El
boxeo rindió una impecable faena.
China, al igual que en la categoría de mayores en Beijing’08,
reinó con 30 preseas de oro, 16 de plata y cinco de bronce,
aventajando por 11 títulos a Rusia (19-15-11) y Sudcorea (11-5-4).
Ucrania fue cuarta con 10-9-15, según una página anexa al sitio web
del certamen.
Así los cubanos se situaron a la cabeza de América, escoltados
por Estados Unidos (4-9-9) y Canadá (3-1-8) en los lugares 13 y 18,
respectivamente, en tanto por Latinoamérica lo hicieron Brasil
(2-3-2), en el escaño 21, y Colombia (2-3-0), en el 22 de un evento
múltiple en el que 58 naciones se agenciaron títulos, mientras 98
conseguían al menos un bronce.
Justamente, si de futuro se trata, el equipo masculino de
voleibol antillano perfila un horizonte muy serio luego de coronarse
en calidad de invicto con un solo set perdido, frente a Argentina en
la final, elenco al cual se impuso en par de ocasiones: barrida de
3-0 en la clasificatoria y 3-1 (25-23, 25-21, 17-25, 25-20) en el
pleito decisivo, en ambos casos de la mano del extraclase Wilfredo
León, autor de 35 puntos en la definición. Yulian Durán y otro León,
Juan Andrés, escoltaron al santiaguero con 11 y 9 unidades, por ese
orden. Su triunfo fue el colofón de la delegación antillana en el
sudeste asiático.
En conteo regresivo, el judoca Alex García sacó experiencias de
su derrota en individuales (concluyó quinto en la división 81-100
kilogramos), y se impuso en la lid mixta por equipos representando
al conjunto Essen. Para lograrlo se desquitó de su verdugo alemán
Marius Piepke y del japonés Ryosuke Igarashe, quien lo dejó fuera de
las preseas. A ambos los aventajó por yuko.
RETORNO A LO GRANDE
Puños de acero y retorno a lo grande del boxeo, buque insignia
del deporte cubano, fueron las divisas de Robeisis Ramírez (54 kg),
Irosvani Duverger (81) y Lenier Perot (91). Ajustados a la máxima de
los tres mosqueteros, los púgiles reeditaron su cetro mundial
juvenil bajo los cinco aros.
Si en el cuadrilátero estuvo el motor, el campo y pista se
consolidó como disciplina de vanguardia en Cuba, dando fe de su
trabajo consecuente: Norge Sotomayor (400 metros c/v), Radamé Fabar
(triple salto), monarcas; y Lismania Muñoz (jabalina), subcampeona,
ratificaron el prestigio de las vallas, los "canguros" y el área de
lanzamiento.
Les tocó entonces a los reyes "inéditos", no por el hecho de
poseer menos talento, sino por lo sorpresivo de sus coronas entre
"monstruos" nacientes europeos y asiáticos. Así se inscribieron la
pentatleta Leidy Laura Moya y el gimnasta Ernesto Vila, nada menos
que en ejercicios a manos libres. Precedido por el aval de
generaciones anteriores, el canoísta Osvaldo Saceiro escaló a lo más
alto del podio.
Tampoco podían faltar otras disciplinas de combate como la lucha
y el taekwondo, que aportaron dos plateadas y un bronce por
intermedio de Yosvani Peña y Abraham Conyedo, y Yuleimi Abréu,
respectivamente, así como el pesista Ediel Márquez, en otra
especialidad donde la mayor de las Antillas goza de relieve
internacional.
El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques
Rogge, convocó a la juventud mundial para dentro de dos años en
Innsbruck (Austria), sede de los Juegos de Invierno, y dentro de
cuatro en Nanjing (China), para la segunda edición de los de verano.
En Singapur intervinieron 3 600 deportistas de 14 a 18 años, en
los mismos deportes del programa de los Juegos Olímpicos aunque con
disciplinas adaptadas a la edad de los participantes.
Hoy, una vez más podemos decir que bajo los cinco aros en el
2016, Cuba estará dignamente representada. |