Una ola de calor bate este jueves en 18 estados norteamericanos, 
			mientras meteorólogos pronostican altas temperaturas durante el 
			resto de la semana en gran parte del país.
			Autoridades en el sur, medio-oeste y partes del norte emitieron 
			advertencias a la población acerca de que la combinación de calor 
			con alta humedad podría ocasionar enfermedades respiratorias o de la 
			tensión sanguínea, reporta Prensa Latina.
			De acuerdo con fuentes médicas, nueve personas murieron en 
			Estados Unidos desde la semana pasada como consecuencia de la 
			situación climática con más de 100 grados Fahrenheit (37,7 celsius) 
			en algunas regiones.
			La mayoría de los fallecidos son personas de más de 65 años y 
			pertenecientes a la clase media baja o familias pobres.
			Departamentos como Misuri, Tennesse, Misisipi y Alabama 
			reportaron muertes de ancianos por infartos cardiacos provocados por 
			el calor intenso, precisó la cadena CNN.
			El Servicio Nacional de Meteorología recomendó a los 
			estadounidenses tomar duchas frías (más que ventilación), y evitar 
			bebidas con alcohol o café o actividades al aire libre.