En medio de un intenso calor, los incendios forestales continúan
propagándose este martes en el oeste de Rusia, donde miles de
bomberos y socorristas continuaban la lucha para mitigarlos y
liquidar las consecuencias.
De acuerdo con fuentes gubernamentales, las llamas arrasaron
hasta el momento unas 172 mil hectáreas, principalmente en los
Urales, la región del Volga y la porción central de Rusia, reporta
Prensa Latina.
Mientras, continúan bajo régimen de situación extraordinaria unas
14 regiones de la federación, incluida la provincia de Moscú.
El presidente del país, Dmitri Medvedev, decretó el estado de
emergencia en las siete regiones más afectadas, donde murieron al
menos 40 personas como consecuencia de los incendios.
Para el alto funcionario del ministerio de Situaciones de
Emergencia, Vladimir Stepanov, el calor extremo crea situaciones
desfavorables. Lamentablemente no podemos esperar una mejora de aquí
al fin de la semana, agregó.
En las labores de extinción del fuego participan tres mil 751
personas y mil 256 unidades de técnica, y se emplea activamente la
aviación del ministerio para Situaciones de Emergencia, además de
las fuerzas de apoyo del ministerio de Defensa.
El trabajo no cesa. Es una verdadera batalla, subrayó Stepanov al
tiempo que destacó la gestión de socorristas y bomberos quienes
salvaron de las llamas a 320 localidades.
Según el sitio Web del ministerio de Situaciones de Emergencia,
en las últimas 24 horas se registraron 323 nuevos focos de fuego
forestal, de los cuales 247 fueron apagados.
Las previsiones meteorológicas prevén para este martes
temperaturas cercanas a los 40 grados Celsius en Moscú y la región
que la rodea y una reducción de la visibilidad a menos de mil metros
a causa del humo.