Tenemos que librar la batalla por la máxima eficiencia

Nosotros tenemos que librar una batalla en cada centro de trabajo, en cada servicio, en cada aspecto fundamental de nuestra vida política, económica y social, apoyándonos sólidamente en las masas. Una verdadera batalla¼ por la máxima eficiencia en la organización, óptimo aprovechamiento de los recursos materiales y humanos, la gran batalla por la productividad del trabajo, que en los meses y años venideros deberemos librar, sin lo cual nuestros problemas no tendrían solución posible.

¼ Al desaparecer los factores inhumanos que antes obligaban al trabajo, la alternativa de esto es el máximo desarrollo de la conciencia colectiva y el empleo de la fuerza coercitiva de la sociedad trabajadora sobre aquellos que aspiren a vivir parasitariamente del esfuerzo de los demás, rehuyendo el cumplimiento de su más elemental deber social y humano.

Esa minoría nos explota, porque no trabaja y calza, viste, bebe, come, va al cine, se monta en un ómnibus, ve un espectáculo público, recibe medicinas si se enferma, se le salva la vida, incluso hasta lo entierran gratis si se muere, señores. Eso es una cosa incuestionable. Tiene todo. Pero cada uno de los bienes y servicios que ese hombre recibe lo produce alguien.

Fidel , 3 de septiembre de 1970

 

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