|
La virtud más esencial es la modestia
Será necesario luchar durante bastante tiempo para que la virtud más
importante, la virtud más esencial, la virtud primera de un técnico,
de un científico, se imponga. Y esa virtud debe ser la modestia, ¡la
modestia! Y recuerden eso siempre: ¡la modestia! Cuántas relaciones
de tipo humano se envenenan, cuántas cooperaciones se hacen
imposibles, cuántas habladurías, cuántas chismografías, cuántas
contradicciones derivadas de que el hombre todavía no haya sido
suficientemente capaz de dominar ese primitivismo que lleva en sí,
ese espíritu egoísta, ese individualismo, ese considerarse superior
a los demás. Cuánto habrá que luchar para dominar hasta las formas
de lenguaje; inculcar en los hombres ese sentido de que lo
importante es la obra, lo importante es lo que se haga, lo
importante es el contenido de lo que se haga, sin que importe si nos
reconocen o no el mérito, sin que importe que nos reconozcan o no la
paternidad de una idea, la paternidad de una investigación ( ...
). A veces se envenenan las relaciones por celos profesionales, por
esos vicios pequeñoburgueses que todavía subsisten desgraciadamente.
Fidel, 13 de marzo de 1969 |
|
|