.— La Marina
brasileña, en planificación conjunta con las Fuerzas Armadas y
coordinada por el Ministerio de Defensa, iniciará el lunes próximo
la Operación Atlántico II, un ejercicio de entrenamiento que simula
una guerra moderna.
El vicejefe de operaciones navales de la Marina brasileña,
contralmirante Paulo Ricardo Médici, señaló que el ejercicio militar
-a concluir el día 30- es la simulación de una guerra moderna en
defensa de los intereses nacionales contra la posibilidad de una
confrontación en la protección de los recursos naturales y
económicos nacionales.
La operación de entrenamiento se realizará principalmente en la
costa atlántica de la Región Sudeste brasileña, debido a la
importancia de la infraestructura de petróleo y gas y del valor
económico y estratégico de esa zona en una eventual disputa
internacional por los recursos del mar.
Esa área representa cerca del 42 por ciento del territorio
nacional.
Médici precisó que en la Operación Atlántico II participarán 22
navíos, 17 aeronaves, 18 tanques de combate y 10 mil militares, y
explicó que para el contexto de la crisis fue creado un enemigo
ficticio, según reportó la estatal Agencia Brasil.
Tras asegurar que este ejercicio será más complejo que la
Operación Atlántico I, efectuada en 2008, el jefe militar indicó que
para esta segunda versión fueron elaborados dos escenarios de
amenazas.
En el primero la escuadra debe proteger áreas como la Bacia de
Campos, en el estado de Espíritu Santo, y la Bacia de Santos, en Sao
Paulo, adelantó Médici.
Hace poco más de dos años, en esa zona, que se extiende desde
Espíritu Santo hasta Santa Catarina, la estatal Petróleos de Brasil
(PETROBRAS) descubrió enormes yacimientos de hidrocarburos, cuyas
reservas probadas colocan a Brasil entre las primeros países del
mundo en la tenencia de ese recurso natural no renovable.
El segundo, prosiguió el jefe militar, está relacionado con la
defensa de la pesca y se desarrollará en los archipiélagos de
Fernando de Noronha y en el de Sao Pedro y Sao Paulo, en el litoral
del estado de Pernambuco.
La simulación de la guerra moderna tendrá también un fin social,
pues desarrollará acciones de atención médica y odontológica en los
diversos municipios envueltos en el operativo militar de
entrenamiento. También serán promovidas clases de primeros auxilios
e higiene para la población, de acuerdo con la Agencia Brasil.