"Quiero
pedirles que como creadores y artistas, no renuncien —nunca— al
sueño legítimo de tocar el cielo, siempre que como hijos de su
tierra y de su tiempo, tampoco renuncien a ser parteros de un
futuro. Permítanme afirmar que con el título que reciben, de cierta
manera, hoy nos graduamos todos."
Así concluyeron las palabras que en la graduación 30,
correspondiente al curso escolar 2009-2010, del Instituto Superior
de Arte, ISA, dirigió a los 218 egresados del Centro, su rector, el
doctor Rolando González Patricio.
El acto, celebrado al calor propio de una fragua artística, en el
capitalino Teatro Mella, irrumpió con el material audiovisual 30
graduaciones del ISA, cuyas imágenes ilustran momentos puntuales
que marcan la historia de la universidad de las artes, así como a
personalidades y estudiantes de sus primeros años. La actuación de
un grupo musical integrado por discípulos de este curso y la
inauguración de una exposición de pintura realizada por estudiantes
y profesores del centro, también formaron parte del agasajo.
Convencido de que "la excelencia, y no las cantidades seguirá
siendo nuestra norma suprema", el Instituto licenció en la
especialidad de Música a 109 estudiantes; 43, en Arte de los Medios
de Comunicación Audiovisual; 19, en Artes Plásticas; 17, en Teatro,
y 2, en Arte Danzario; por otra parte, las filiales de Holguín y
Camagüey sumaron 10 y 18 alumnos, respectivamente.
Sandra Bárbara Cepero Álvarez, quien resultó ser la mejor
graduada integral del curso, se dirigió con efusivas palabras a sus
maestros en nombre de sus compañeros, de los que —incluyéndola—, 92
obtuvieron Título de Oro. Agradeció la formación recibida y solicitó
la confianza que deberán depositar en ellos que serán "dignos
artistas de nuestra Revolución".
Al acto asistieron Rafael Bernal y Vivian Velunza, viceministros
de Cultura; el vicepresidente del ICRT, Waldo Ramírez; profesores,
egresados del ISA y amigos y familiares de los recién graduados.