Una explosión de rayos gamma, la más violenta registrada por
científicos hasta la fecha, fue captada por el telescopio espacial
Swift después de atravesar unos cinco mil millones de años luz.
Denominado GRB 100621, el estallido es la fuente más brillante
nunca vista en estas longitudes de onda a distancias cosmológicas,
explicó David Burrows, director científico del telescopio de rayos X
Swift, reporta Prensa Latina.
El equipo, diseñado para el estudio de violentos fenómenos
cósmicos, captó un rango elevado de energía. La intensidad de estos
rayos X ha sido inesperada y no tiene precedentes, señaló Neil
Gehrels, investigador principal del Swift en el centro de vuelos
espaciales Goddard, de la NASA.
Para Phil Evans, el estallido fue tan brillante que en sus
primeros momentos colapsó todo nuestro sistema de análisis de datos.
Muchos fotones bombardearon el detector a cada segundo, era
imposible contarlos de manera rápida, detalló.
El hecho ocurrió el pasado 21 de junio, pero Evans y Gehrels
tardaron varios días para descifrar lo sucedido. Juntos tratamos de
reinterpretar los cálculos y los datos sobre su naturaleza y la
inusitada violencia detectada en esta explosión, explicaron.
Aunque con el fenómeno el telescopio se apagó de manera
momentánea, los especialistas pudieron calcular la presencia de 143
mil fotones de rayos X por segundo, o sea, 140 veces más intenso que
la fuente de rayos X más potente conocida hasta ahora,
puntualizaron.
Los estallidos de rayos gamma son considerados uno de los
misterios de la cosmología; sin embargo, este ocurrió por la
explosión de una estrella supermasiva, el colapso mortal de un
gigante estelar incapaz de resistir su propio peso y en el momento
de convertirse en un agujero negro, dijeron los científicos.